Ningún puñado de ninfas neumáticas te van a impedir ejercer tu derecho a la libertad. No te dejarás atrapar así como así. Empujas a una de las chicas, que a su vez, en su caída, empuja a otra, y esta a otra... hasta que al final caen como las fichas de un sexy domino, golpeando con fuerza la pared. Esta parece parpadear, como si fuera un monitor. Un gato negro maulla. Saltas por encima de los cuerpos de las chicas hasta llegar a la calle. Hay un taxi esperando en la puerta. Sin pensarlo, te zambulles en su interior.
- A la calle del Greco por favor. Quiero volver a casa.
El taxi se adentra en la ciudad, hace mucho que no pasas por el centro, pero esos rascacielos no se pueden haber construido en un par de meses
- Oiga, por aquí no se va a mi casa. - avisas preocupado.
El taxista se gira, es un oriental sonriente.
- No vamos a casa. Vamos a salvar el mundo.
De todos los taxis de todo el mundo, has tenido que subirte al de un chiflado chino que además no conoce el callejero de la ciudad.
- Si en un desprecio absoluto por tu vida, saltas del coche en marcha, ve al post 53
. Si Te dejas llevar, acomodate en el post 47
